[VIDEO] La jugada que salvó el juego sin hit ni carrera de Carlos Rodón

El inicialista José Abreu salvó a Carlos Rodón de lo que hubiera sido un imparable dentro del cuadro en la novena entrada.

Carlos Rodón agradeció a las 7,148 personas que se dieron cita en el estadio de Chicago. (Foto: AP)

El zurdo Carlos Rodón llegó a la novena entrada lanzando un juego perfecto. Si bien es cierto que se quedó a dos outs de conseguir la hazaña más grande en el beisbol, el cubanoamericano consiguió un juego sin juego sin hit ni carrera. Perfecto o no-hitter, ninguno de esos logros hubieran sido posibles sin la jugada que salvó el juego de un imparable.

Jugada salvadora

Con los primeros 24 bateadores retirados en orden, Rodón volvió a la novena entrada para concluir su cita con la historia. El primer bateador de la tanda para Cleveland era el jardinero central Josh Naylor, quien estuvo a unos centímetros de romper la magia del lanzador.

Con la cuenta en 0-2, Rodón hizo su lanzamiento número 98 de la noche. Naylor alcanzó a machucar un slider que se iba alejando de la zona de strike, suficiente para emprender el vuelo hacia la primera base. El inicialista José Abreu fue a buscar la pelota, la tomó y tuvo que apresurarse a tocar la almohadilla pues Naylor estaba a pocos metros de llegar primero.

El cubano dio tres pasos hacia la base y cuando sintió que el tiempo se agotaba, estiró la pierna derecha para tocar la base antes que el corredor y conseguir el out.

Declaraciones de Carlos Rodón

Después del juego el lanzador aceptó que fue una jugada peligrosa para el inicialista Abreu y el bateador Naylor. Pero afortunadamente para él, las cosas se dieron a su favor.

“Quería que tuviera cuidado, que no se lastimara”, dijo Rodón. “Esa fue una jugada increíble, hombre, una jugada increíble. Hubo algunas jugadas grandes en corto ... quiero decir, pasas por ese juego, hay bastantes jugadas que llevaron a este resultado”, dijo Rodón después del partido.

Especialistas en juegos sin hit ni carrera

El juego sin hits de Carlos Rodón se convierte en el número 20 en la historia para los White Sox, el segundo equipo con más juegos de este tipo en las Grandes Ligas, solo superados por los 26 de los Dodgers.