Veinte años del fin de la maldición de los Boston Red Sox

En 2004 se acabó el maleficio de Babe Ruth, uno de los momentos más especiales en la historia del beisbol

David Ortiz fue pieza clave de los Red Sox en la Temporada 2004, cuando rompieron la Maldición de Babe Ruth. Foto: @RedSox

La Serie Mundial del año 2004 se convirtió en un antes y un después para los aficionados a los Red Sox. El equipo de Boston se alzaba con el título tras muchos cursos sin saborear los mieles de este triunfo, y consagrándose como una de las franquicias que más simpatía despierta lejos de las fronteras norteamericanas.

Pese a que ya han pasado dos décadas, la práctica totalidad de los aficionados del Estado de Massachussets a los Medias Rojas, lo sienten como si hubiera sido ayer. Lástima que la plantilla actual diste mucha de aquella que hizo historia, ya que las apuestas deportivas estiman muy complicado que los Red Sox puedan conseguir un nuevo título y ampliar así su legado. Pero, para los nostálgicos, rememoremos aquella épica victoria de los Red Sox.

​El camino hacia el título fue muy emocionante y plagado de momentos clave que serán muy difíciles de repetir en el futuro. Después de una completa regular season, los Red Sox se enfrentaron a los Anaheim Angels en la Serie Divisional de la Liga Americana. Los del Estado de Massachussets dominaron a los Angels, ganando la serie 3-0, y avanzaron a la Serie de Campeonato de la Liga Americana, donde los esperaban sus archirrivales, los New York Yankees. Sin duda, uno de los duelos con mayúsculas de la MLB que levanta pasiones en todos los lugares del planeta.

Esta serie entre los Red Sox y los Yankees fue una de las más emocionantes y recordadas en la historia del béisbol. Los Yankees tomaron una ventaja dominante de 3-0 en la llave, y parecía que los Red Sox estaban destinados a otra amarga derrota ante su eterno rival. Sin embargo, el equipo de Boston hizo algo sin precedentes: se convirtieron en el primer equipo en la historia de las Grandes Ligas en remontar una eliminatoria de postemporada, después de estar perdiendo 3-0. Ganaron los siguientes cuatro partidos consecutivos, culminando con una victoria decisiva en el séptimo juego en el Yankee Stadium, asegurando así su pase a la Serie Mundial. Sin olvidar aquel Gran Slam conseguido por David Ortiz que firmó cuatro puntos con su bateo.

En la Serie Mundial, los Red Sox se enfrentaron a los St. Louis Cardinals, un equipo fuerte que había tenido la mejor marca de la temporada regular en 2004. A pesar de que los Cardinals eran un formidable oponente, los Red Sox los dominaron por completo, logrando una barrida de 4-0 en la serie. Esta victoria fue histórica, no solo porque los Red Sox ganaron su primer título de Serie Mundial desde 1918, sino por la forma en que lo hicieron, superando a los Yankees de manera dramática y luego arrasando a los Cardinals.

Nombres como David Ortiz, conocido como "Big Papi", Curt Schilling o Keith Foulke han quedado para siempre marcados en oro en la franquicia de Boston. Un gran ejemplo a seguir en las temporadas venideras a la hora de volver a soñar con el título.