Este pelotero volverá a jugar en MLB tras 8 años y una suspensión
La gerencia de los Brewers activó en su roster a Jon Singleton, quien jugó por última vez en 2015 y años después fue suspendido por la política antidrogas.
Quien fuera uno de los mejores prospectos de las Grandes Ligas está de regreso en el MLB después de que la gerencia de Brewers activó en su roster a Jon Singleton, el cañonero estadounidense que hace ocho años vio acción por última vez en el "Big Show" y que a la postre fue suspendido por el uso de mariguana recreativa mientras era prospecto de los Astros.
Tomará el lugar del 1B Darin Ruf, quien fue enviado a la lista de lesionados, y estará disponible para el juego de este sábado 3 de junio ante Cincinnati Reds en el Great American Ball Park.
En enero de 2013, siendo uno de los prospectos mejor calificados de los Astros, fue suspendido 50 juegos por violar la política antidrogas de las Ligas Menores.
Sin embargo, eso no detuvo su caminó a las Grandes Ligas pues, el 3 de junio del 2014, debutó con Houston en una temporada que solo bateó .168 con 13 dobles y 13 jonrones en 95 juegos. De hecho, fue el primer año de un contrato por cinco temporadas, decisión que sorprendió a propios y extraños pues Singleton aún no debutaba en Las Mayores cuando se cerró dicho pacto. Un año más tarde vio acción por última vez en el mejor béisbol del mundo, iniciando una travesía de ocho años.
En 2017, falló nuevamente un antidoping por el uso de mariguana y la oficina de las Grandes Ligas lo suspendió por 100 juegos el 23 de enero. En mayo los Astros decidieron darle su baja.
Estuvo fuera del béisbol durante tres años completos, un período en el que también la marihuana fue legalizada en varios lugares de Estados Unidos y Canadá, medida que al tiempo también influyó en el béisbol siendo eliminada de la lista de sustancias prohibidas.
Durante 2021 jugó con los Diablos Rojos en la Liga Mexicana de Beisbol, donde se convirtió en uno de los pilares ofensivos del equipo escarlata en su camino hasta la Serie de Campeonato, actuación que le permitió volver a firmar en el béisbol de Estados Unidos. Bateó .219 en 134 juegos de su primer año, pero obtuvo muchas bases por bolas (117), su promedio de embasarse subió a .375 y el poder seguía ahí (22 dobles, 24 jonrones), cifras que a los Brewers les llamó la atención para mantenerlo en su programa hasta su regreso.