Giants le rinde tributo a Willie Mays vistiendo su número 24
En su primer juego como locales, los San Francisco Giants no dejaron pasar la oportunidad de rendirle un tributo al icónico exjugador que falleció a los 93 años.
Por primera vez después de 50 años, un jugador de los San Francisco Giants vistió el número 24. Mejor dicho, todos lo hicieron en un sentido homenaje este lunes cuando el club tuvo su primer juego como local desde que Willie Mays falleció.
Giants rinde tributo a Willie Mays en San Francisco
Los Giants honraron al ícono de la franquicia, miembro del Salón de la Fama, dos veces MVP y uno de los mejores jugadores que haya visto en la historia del béisbol cuando todos los jugadores del equipo vistieron su número 24 durante el primer partido de la serie contra los Cubs.
El equipo retiró el número 24 después de que la legendaria carrera de “Say Hey Kid” llegó a su fin, y ningún jugador de los Giants lo había usado desde que Mays fue traspasado a los Mets en mayo de 1972.
“Tendremos suerte de hacerlo”, dijo Kyle Harrison, oriundo del Área de la Bahía, sobre usar el número retirado de Mays. “Es una locura pensar en eso, sí, nos lo vamos a poner. Es un honor”.
Los Giants estaban de gira cuando Mays falleció, dos días antes del partido de la MLB del jueves pasado en Rickwood Field, un conmovedor homenaje a las Ligas Negras donde la carrera profesional de Mays comenzó en 1948 con los Black Barons en Birmingham, Alabama.
La presencia indeleble de Mays se sintió en Rickwood, y la celebración de su vida continuó en Oracle Park. Desde que cada Giant se puso su número 24 hasta una ceremonia previa al juego en su honor, el lunes se trató del máximo Eterno Gigante.
“Hoy será un día emotivo por el número 24”, dijo el mánager Bob Melvin. “Y lo dejaremos así en lo que respecta a su número y lo que significa para este equipo, esta organización, la ciudad, el país, todo".
Incluso antes de que los Giants regresaran a casa, los fanáticos se habían reunido en la Plaza Willie Mays, afuera del Oracle Park, para rendirle homenaje a la leyenda. La estatua de Mays junto a la entrada del estadio estaba cubierta de flores, fotos, velas, pelotas de béisbol y sentidas notas.