LMB: La inédita historia de los hermanos Madero

En el sonido local se escuchó: "al bat, Diego Madero, segunda base". El jugador de los Piratas de Campeche se acercó al plato y antes de colocarse en la caja de bateo se dio un abrazo con el umpire de home. La razón, estaba saludando a su hermano.

Ellos son Vicente Madero (umpire) y Diego Madero (pelotero), dos integrantes de la Liga Mexicana que han cumplido su sueño en el beisbol en áreas distintas pero que se encuentran dentro de un diamante en algunas ocasiones durante cada temporada desde que se toparon por primera vez en el 2012.

"Es un orgullo y una emoción grande el encontrarnos en el campo", explicó Diego, segunda base de los Piratas en entrevista con Séptima Entrada. "Es una emoción muy grande vivir esta experiencia, es un honor poder ser pelotero profesional y vivirlo cerca de mi hermano, quien también está viviendo su sueño".

El abrazo entre los hermanos Madero se presentó el viernes 19 de mayo en el Estadio Alfredo Harp Helú, día en que los Piratas de Campeche y los Diablos Rojos del México comenzaron una serie de tres juegos, momento que continuó con una historia que arrancó en 2012.

¿CÓMO FUE ESE PRIMER MOMENTO DONDE SE ENCONTRARON EN UN DIAMANTE DE LMB?

Vicente inició su carrera como umpire en la LMB en la temporada 2010 mientras que Diego, su hermano menor, hizo su debut en la liga de verano en el campaña 2012... y fue justamente en esa temporada cuando se presentó el primer encuentro dentro de un diamante.

El fin de semana del 29 al 31 de mayo de ese año, los Leones de Yucatán y los Vaqueros de La Laguna se enfrentaron. Diego jugaba con Laguna en su primera campaña en la LMB y en la tercia de umpires que fueron asignados para ese juego estaba Vicente. El sábado 30 estuvieron juntos por primera vez pero 'de lejos', ya que Diego entró de emergente y cubrió la segunda base mientras que Vicente era el umpire de tercera. Pero al día siguiente se dio el momento esperado. 

"Ese día yo llegué al estadio y sabiendo que me iba a tocar en home, le dije a Diego que él también iba a jugar. Yo estaba seguro que no iban a dejar pasar la oportunidad de estando yo en home que él no jugara. Cuando vimos el primer line up no estaba su nombre pero cuando ya salí para el juego vi que estaba calentando y me acerqué para decirle 'te dije, sí ibas a jugar", recordó el umpire.

Diego y Vicente en el Estadio Alfredo Harp Helú. Foto: Miguel Boada

Para Vicente resultó un momento muy especial pero para Diego fue aún más allá, ya que él, siendo novato, enfrentó una situación que nadie más había vivido, ya que ellos se convirtieron en la primera pareja de hermanos que 'trabajan'' juntos en la Liga Mexicana como umpire y como jugador.

"Sí estaba nervioso ese día, como cualquier jugador novato que va al terreno de juego pero ese día también fue más impresionante para mi porque sabíamos que mucha atención iba a estar puesta sobre nosotros y que ambos íbamos a tener más presión por hacer muy bien las cosas", explicó el intermediarista.

EL ABRAZO EN LA SERIE DEL REY

Aunque desde ese momento en 2012 se ha hecho costumbre que los hermanos Madero se saluden con un abrazo cuando llegan a coincidir en un diamante, en el 2018 se vivió un momento mucho más especial cuando se encontraron en la Serie del Rey entre los Leones de Yucatán y los Sultanes de Monterrey.

En aquella ocasión Vicente formó parte de la sexteta de ampayers que llevaron el juego mientras que Diego formaba parte de los melenudos. En ese momento también se presentó el abrazo de los Madero en el diamante.

"Ese abrazo se hizo viral porque se dio en la Serie del Rey, en la Final, y para mucha gente resultó algo que no se tenía que dar pero ese fue un momento muy especial para nosotros, no sabemos si se va a volver a dar y no iba a perder la oportunidad, ya que además no es nada malo y solo disfrutamos el momento", explicó Vicente.

LA PRESIÓN EXTRA POR VIVIR ESTA INÉDITA EXPERIENCIA

El ser la primera pareja de hermanos jugador-umpire en la Liga Mexicana no solo es un momento emotivo, también es una experiencia que se convierte en presión para Vicente y Diego, ya que saben que su situación no a todos les agrada por ser un hecho 'fuera de lo común' que se puede malinterpretar.

"Para mi es un momento de mucha emoción pero también de mucha responsabilidad, sobre todo cuando estoy en home porque siento que todas las miradas están sobre nosotros y están los comentarios de 'lo irá a favorecer, le irá a ayudar'. Es algo que tengo en la mente pero que jamás ha ocurrido y que jamás sucederá porque ambos somos profesionales y hacemos el trabajo de la mejor manera posible", explicó el umpire.

Y aunque existe ese lado 'negativo' de la historia, también está la parte positiva, donde ambos saben que es mayor el apoyo y el respaldo que tienen dentro y fuera del mundo del beisbol.

"Son más lo comentarios positivos que hemos recibido de mostrar también ese lado humano del juego y nos apoyan por hacerlo. Somos profesionales y ambos vamos a hacer nuestro trabajo de manera ética y responsable siempre", comentó Diego. "Y ese respaldo lo recibimos incluso en pleno juego cuando compañeros nos echan carrilla porque nos saludamos, pero son en buena lid esos comentarios".

De esta manera es como Vicente y Diego, sobre el diamante del Estadio Alfredo Harp Helú, agradecieron al beisbol el poder seguir compartiendo su pasión dentro del campo de juego, una tradición que cumple 11 años sin perder intensidad.

"Es algo muy gratificante poder seguir viendo a mi hermano dentro del terreno, el verlo tener éxito en su trabajo, el saber cómo se esfuerza y todo el trabajo que hace para sobresalir y ser mejor y mejor", sentenció Vicente. ""El amor de hermanos que siempre ha estado ahí y que platicando dentro y fuera del terreno es algo que nunca va a terminar. Siempre va a ser algo muy bonito".

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