¡UNA MÁS! Diablos suma ocho victorias al hilo al ganar a El Águila

Con dos jonrones y un hit impulsor, el México vino de atrás para ganar el primer choque de la serie en Veracruz

Moisés Gutiérrez es felicitado después de pegar el jonrón con el que los Diablos empataron el juego a tres. Foto: Cortesía El Águila de Veracruz

Editorial Séptima entrada

Los Diablos Rojos del México han extendido su racha de triunfos y ahora son ocho victorias consecutivas las que tienen, después de que vencieron 4-3 a El Águila de Veracruz, al abrir la serie en el Estadio Beto Ávila.

La novena escarlata es en este momento el equipo con la mejor racha en la pelota de verano, luego de que han vencido a los Piratas de Campeche (un juego), Tigres de Quintana Roo (tres encuentros), Leones de Yucatán (tres duelos) y El Águila (una vez).

La novena capitalina perdía 3-0 al arrancar el juego pero después el pitcheo apagó por completo a los locales. Primero fue Moyers el que ya no permitió más daño para después tener a Jio Orozco, Jeffry Niño y Aaron Brown colgando ocho ceros consecutivos.

El Águila atacó rápido al abridor colorado, a quien le anotaron tres veces en el primer capítulo gracias a panorámico cuadrangular de Junior Lake con dos compañeros en las almohadillas.

El 3-0 se mantuvo en los cartones al terminar el primer tercio pero en la parte alta de la cuarta los Rojos emparejaron por la vía del jonrón. Roberto Ramos pegó su octavo vuelacercas de la campaña para poner el 3-1 y Moisés Gutiérrez hizo lo propio pero con Ramón Flores en las bases, y así el juego se puso 3-3.

Entonces el encuentro fue un intenso duelo de pitcheo que se resolvió cuando Roberto Ramos pegó un imparable productor con hombres en las esquinas, con el que Jesús Fabela anotó el 4-3 en la séptima tanda.

Luego de este encuentro, los Diablos y El Águila se toparán de nuevo en el Estadio Beto Ávila este miércoles a partir de las 19:30 horas, en donde se presentará como duelo de abridores el choque entre Bernardo Flores (0-1, 3.75) y Joshua Guzmán (3-1, 3.86). Séptima Entrada