¡ESPECTACULAR! Japón deja en el terreno a México y va a la final del Clásico Mundial

La selección nipona montó un espectacular regreso en el que anotó dos veces en el último inning para regresar a la final del torneo

Japón a la final del Clasico Mundial

Miguel Boada Nájera

La Selección de Japón se quita la espina y está de regreso en la Final del Clásico Mundial de Beisbol después de ganar un extraordinario encuentro semifinal, donde dejó en el terreno a México con una victoria por pizarra de 6-5, y ahora disputará el título del torneo frente a Estados Unidos.

Munetaka Murakami pegó un doblete con dos compañeros a bordo, en la novena entrada, para que la escuadra japonesa dejara en el terreno a los mexicanos, regresando así a la final del torneo después de faltar a dicha cita en las dos ediciones anteriores.

Japón vino dos veces de atrás en este duelo, primero para empatar los cartones en la séptima entrada y después con el doblete de Murakami con dos compañeros a bordo y sin out en la parte baja de la novena, para así liquidar el encuentro.

Ahora, este martes se verán las caras con los Estados Unidos para disputar el título del Clásico Mundial de Beisbol, siendo la primera ocasión en que se verán las caras en esta instancia.

ASÍ FUE EL JUEGO

Los dos abridores empezaron con mucho poder en sus lanzamientos y, aunque los bats rivales le encontraron la bola, dominaron con ponches, rolas para doble play y elevados en las primeras tres entradas, hasta que se acabó la magia.

En la parte alta del cuatro inning, la ofensiva mexicana puso a corredores en segunda y primera luego de que Rowdy Téllez pegó una rola pegada a la tercera base que se fue al jardín porque le habían puesto formación especial e Isaac Paredes conectó un sencillo a lo corto del izquierdo. Entonces llegó Luis Urías para prender un cutter de 90 millas de Roki Sasaki para colocar a México arriba 3-0.

Mientras los bats pusieron adelante a México, Patrick Sandoval se encargó de colgar ceros en cuatro entradas, y cuando lo necesitó, la defensiva apareció, como en la parte baja de la quinta entrada cuando Randy Arozarena realizó espectacular atrapada en el jardín izquierdo para robarse un home run de Kazuma Okamoto.

Entonces el juego quedó en los brazos relevistas. Japón empezó a presentar distintos brazos traídos del bullpen mientras que José Urquidy entró por el lado mexicano.

El juego llegó a la séptima con México arriba en la pizarra 3-0 y los japoneses se presentaban con la parte gruesa de su orden al bat, y eso terminó convirtiéndose en la ofensiva del empate.

Pero ni el equipo ni la afición se cayeron después de eso y llegó la respuesta inmediata, una carrera después de que Randy Arozarena y Alex Verdugo ligaron dobletes. Séptima Entrada